lunes, 2 de junio de 2014

Descansar es entrenar

Siempre que un deportista, se marca un reto deportivo, en su cabeza tiene muy claro que le esperan largas horas de entrenamiento para cumplirlo, pero de nada le servirán, si estas sesiones, no están bien planificadas, y sobre todo, respetan los principios básicos necesarios.

Para planificar un programa de entrenamiento, que produzca las adaptaciones morfológicas y funcionales deseadas, siempre deberemos tener presente el principio básico de la supercompensación y que supondrá, que tras la realización de una sesión de entrenamiento que supere la intensidad "normal" acostumbrada, el musculo, se recuperará, reconstruyéndose con la capacidad de rendir al nivel de  la nueva carga solicitada.
Es decir, que si nuestro entrenamiento, no tiene la exigencia debida, no habrá mejora, pero si es enormemente exigente nuestro cuerpo, se resentirá, y nos encontraremos en el mejor de los casos, con agujetas, o incluso con otros dolores, contracturas, sobrecargas, o lesiones, que nos obligen a parar y a fracasar en nuestra mejora.

Por eso es tan importante, confeccionar una planificación de entrenamiento deportivo, y cumplirla, lo más ajustadamente posible, atendiendo a una intensidad equilibrada al momento de forma en que nos encontremos y tenga una progresión continua y uniforme.

En un programa de entrenamiento, deberemos fijar, los días de trabajo, los ejercicios a realizar, la intensidad de los mismos, y sobre todo, los días de descanso (activos y pasivos), que vamos a concedernos para proporcionar el tiempo necesario a nuestros músculos, para que puedan recuperarse y aprovechar la supercompensación que tan sabiamente nos brinda nuestro organismo.

De nada nos servirá machacar músculos y tendones, si no le damos posteriormente el tiempo necesario para su reparación completa. No hacerlo bien, nos garantizará un montón de molestias y lesiones que nos impidan entrenar y que nos alejaran de nuestras metas fijadas.

Una vez realizado el descanso oportuno, será cuando volvamos a exigirle más trabajo, aplicando el principio de incremento progresivo, y siempre equilibrado de la carga, para volver a producir mejora en nuestras fibras musculares.

Será también necesario, que estos principios, sean repetitivos a lo largo del tiempo, pues la constancia es el mayor factor de éxito de un deportista. 

Es necesario, siempre tener presente, diferentes factores de entrenamiento, como pueden ser, la ganancia de fuerza, de resistencia, o de flexibilidad, ... que deben ir parejos, sin olvidarnos de ninguno. No nos servirá muy bien, un biceps muy fuerte, si no es flexible, y viceversa.

En resumen, tan importante como entrenar duro, es descansar con cabeza, pues un cuerpo fatigado, con gran cantidad de sustancias de desecho (acido láctico), y con muchas miroroturas fibrilares, si no esta recuperado para recibir más cargas, lo estaremos condenando a una lesión segura que nos hará parar y zozobrar nuestro ansiada meta.

Recordar por tanto, que DESCANSAR, también es ENTRENAR.

Aupa Jushirokan competición, ... Aurr, aurr, aurr

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